P: ¿Cuáles son las condiciones y restricciones para el uso del vapor flash?

R: El vapor flash, también conocido como vapor secundario, se refiere tradicionalmente al vapor generado cuando el condensado fluye desde el orificio de descarga de condensado y cuando el condensado se descarga desde la trampa.
El vapor flash contiene hasta el 50 % del calor del agua condensada. El uso de vapor flash secundario puede ahorrar mucha energía térmica. Sin embargo, se deben tener en cuenta las siguientes condiciones al usar vapor secundario:
En primer lugar, la cantidad de agua condensada y la presión son suficientes para garantizar la disponibilidad de suficiente vapor secundario. Las trampas y los equipos de vapor deben funcionar correctamente en presencia de contrapresión de vapor secundario.
Se debe tener especial cuidado al hecho de que, en equipos con control de temperatura, a baja carga, la presión del vapor disminuirá debido a la acción de la válvula de control. Si la presión cae por debajo de la del vapor secundario, no será posible generar vapor a partir del agua condensada.

El segundo requisito es contar con equipo para el uso de vapor secundario a baja presión. Idealmente, la cantidad de vapor utilizada para cargas de baja presión es igual o mayor que la cantidad de vapor secundario disponible.
La falta de vapor puede compensarse con un dispositivo de descompresión. Si la cantidad de vapor secundario supera la requerida, el exceso de vapor debe descargarse mediante una válvula de seguridad o controlarse mediante una válvula de contrapresión de vapor (válvula de sobrepresión).
Ejemplo: Se puede utilizar el vapor secundario de la calefacción, pero solo durante las temporadas en que se requiere calefacción. Los sistemas de recuperación se vuelven ineficaces cuando no se requiere calefacción.
Por lo tanto, siempre que sea posible, la mejor solución es complementar la carga del proceso con vapor secundario del proceso de calentamiento. El vapor secundario del condensado de calentamiento se utiliza para complementar la carga de calentamiento. De esta manera, se puede mantener la oferta y la demanda sincronizadas.
Los equipos que utilizan vapor secundario se ubican mejor cerca de una fuente de condensado a alta presión. Las tuberías para transportar vapor a baja presión son inevitablemente relativamente grandes, lo que incrementa los costos de instalación. Al mismo tiempo, la pérdida de calor en tuberías de gran diámetro es relativamente alta, lo que reduce la tasa de utilización del vapor secundario.