Los hongos comestibles se conocen colectivamente como setas. Entre los hongos comestibles más comunes se encuentran las setas shiitake, las setas de paja, las setas copri, las setas hericium, las setas ostra, el hongo blanco, el hongo bisporus, las colmenillas, los boletos, las trufas, etc. Los hongos comestibles son ricos en nutrientes y deliciosos. Son alimentos fúngicos que pueden usarse tanto como medicina como alimento. Son alimentos verdes y saludables.
Según registros históricos, en mi país, los hongos comestibles se han utilizado como ingredientes en la mesa durante más de 3000 años. Son ricos en nutrientes, tienen un sabor intenso y único, y son bajos en calorías. Han sido populares durante siglos. En la sociedad moderna, si bien existen una gran variedad de ingredientes alimentarios, los hongos comestibles siempre han ocupado un lugar muy importante. Los hábitos alimenticios modernos priorizan cada vez más lo verde, lo natural y lo saludable, y los hongos comestibles cumplen plenamente con estos requisitos, lo que también impulsa el crecimiento de su mercado, especialmente en mi país y en Asia.
De niños, solíamos recoger setas después de la lluvia. ¿Por qué? Resulta que la producción de hongos comestibles requiere requisitos estrictos de temperatura y humedad ambiental. Sin un entorno específico, es difícil que crezcan. Por lo tanto, para cultivar hongos comestibles con éxito, es fundamental controlar la temperatura y la humedad, y un generador de vapor es la opción ideal.
El generador de vapor se calienta para generar vapor a alta presión y aumentar la temperatura para lograr el propósito de la esterilización. La esterilización consiste en mantener el medio de cultivo a una temperatura y presión determinadas durante un período de tiempo determinado para eliminar las esporas de diversas bacterias, promover el crecimiento de hongos comestibles, mejorar el rendimiento y la calidad, y mejorar la eficiencia de los cultivadores. Generalmente, el medio de cultivo se puede mantener a 121 °C durante 20 minutos para lograr el efecto de esterilización, eliminando todos los nutrientes y esporas del micelio. Sin embargo, si el sustrato contiene glucosa, ramitas, jugo de brotes de soja, vitaminas u otras sustancias, es mejor mantenerlo a 115 °C durante 20 minutos. De lo contrario, una temperatura excesiva destruirá los nutrientes y producirá sustancias tóxicas que no favorecen el crecimiento de hongos comestibles.
Hora de publicación: 18 de enero de 2024